Alessia Luna, una estudiante de último año de secundaria, llega a casa para terapia familiar a los 18 años. Mientras caminaba a casa, se sintió incómoda al ver a su hermanastra y se sorprende de que su hermanastro Yuki hablara con ella. Su reunión avanza a la escena apasionada de lujuria y luego deseo sin adulterar; ella muestra sus grandes tetas y demuestra cómo puede tomarlo, con su monstruosa polla.