La hija de 18 años se vuelve loca debido a las estrictas medidas disciplinarias del padrastro; Él la reprende atándola y luego procede a sorprenderla con una variedad de espectadores pervertidos. Follada por el suegro y el tío, se convierte en una esclava sexual no dispuesta, amordazada y amenazada hasta la sumisión.