El tendero atrapa a un joven ladrón, ¿qué le dan y qué recibe como una persecución salvaje. Follado, golpeado y jodido bien. Redención? Una ducha cargada de fiereza sin ropa, desnuda, follando con una polla monstruosa en la oficina, de pie y a cuatro patas. Han sido 18 años de barcos de acero y acciones fetichistas.