Tres adolescentes rebeldes se encuentran en una situación pegajosa cuando las pillan lamiendo una casa.El legítimo dueño de la propiedad, un fornido policía, las pilla con las manos en la masa en su garaje.En lugar de enviarlas a la cárcel, decide utilizar su autoridad para hacerles sus juguetes personales.Las obliga a complacer a su enorme miembro, sus pequeños pechos rebotando mientras lo llevan ansiosamente.El poli luego procede a agacharlos y darles un paseo rudo, sus gemidos resonando en los confines del garaje".Las jóvenes adolescentes son impotentes contra las embestidas implacables de los oficiales, sus agujeros apretados apenas pueden acomodar su pereza.Este encuentro caliente las deja a todas goteando de satisfacción, su juventud salvaje ahora eternamente marcada por este encuentro.